l primer clásico de la temporada entre el Real Madrid y el Barcelona culminó con una victoria para los blaugranas por 1-2, en un encuentro que tuvo que ser detenido durante una hora y veinte minutos, provocando el enfado visible de los futbolistas, especialmente de Luka Modric, quien exclamó: “Vamos a jugar, no somos de azúcar”.
El partido destacó por la actuación estelar de Pau Víctor, quien, tras un inicio de pretemporada impresionante, se perfila para quedarse en el primer equipo y seguir los pasos de Fermín, quien se consolidó el año pasado.
El Real Madrid no se quedó atrás y vio cómo Nico Paz anotaba un gol espectacular, demostrando su potencial como delantero nato. Sin embargo, la falta de ritmo competitivo fue evidente en ambos equipos, dejando claro que aún necesitan tiempo para alcanzar su mejor forma.
Un dato curioso fue la presencia del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, quien observó el partido desde la grada, añadiendo un toque especial a un clásico ya de por sí emocionante.
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