La Selección Española de fútbol masculino inició su camino en los Juegos Olímpicos de París 2024 con una victoria sufrida ante Uzbekistán, ganando 1-2 en un partido lleno de emoción y tensión. Los goles de Sergio Gómez y Pubill aseguraron un comienzo positivo para La Roja, aunque el equipo uzbeko nunca dejó de luchar.
Un Estreno Inolvidable en París
El equipo dirigido por Santi Denia se presentó en el Parque de los Príncipes con una alineación que sorprendió a muchos. Aimar Oroz, inesperadamente en el once titular, reemplazó al habitual Turrientes. Los veteranos de más de 23 años, incluyendo a los campeones de la Eurocopa, Eric Garcia y Cubarsí, fueron fundamentales en el equipo inicial.
Un Inicio Complicado
Uzbekistán comenzó con una presión alta y agresiva, dificultando la salida de balón de España y creando inseguridad en la defensa. Un error temprano de Cubarsí resultó en una tarjeta amarilla, poniendo al equipo español en una posición incómoda. La primera media hora fue difícil para La Roja, con poca circulación del balón en el medio campo.
Gol Salvador de Pubill
Sin embargo, España encontró un respiro gracias a una jugada a balón parado. Fermín, el más activo del equipo, provocó una falta lateral que Sergio Gómez aprovechó para asistir a Pubill, quien anotó el primer gol del partido.
Empate Uzbekistán y Penalti Controvertido
El empate llegó de manera polémica justo antes del descanso. Un penalti señalado por el VAR permitió a Shomurodov empatar el encuentro, dejando a España con un sabor amargo al final de la primera mitad.
Segundo Tiempo: Dominio y Gol de la Victoria
En la segunda mitad, España mejoró su juego. Un penalti a favor no convertido por Aimar Oroz no detuvo a La Roja, ya que Sergio Gómez se redimió rápidamente con un gol decisivo tras un centro de Miranda. A pesar de la presión final de Uzbekistán, España logró mantener el resultado y asegurar la victoria.
Un Comienzo Prometedor
El equipo español terminó el partido pidiendo la hora, pero con la moral alta tras este importante triunfo. La aventura olímpica ha comenzado con buen pie, y aunque el camino hacia las medallas será largo y desafiante, esta victoria ofrece una base sólida para soñar con el éxito en París 2024.
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