La UEFA ha tomado medidas drásticas contra los futbolistas españoles Rodrigo y Álvaro Morata, tras la celebración de la Eurocopa en Cibeles. Los jugadores están acusados de violar cuatro normas clave del Reglamento Disciplinario de la UEFA, derivadas de sus cánticos de “Gibraltar, español” durante la fiesta.
La UEFA, que anunció la investigación el pasado 19 de julio, ha decidido abrir un expediente sancionador contra ambos jugadores. Las acusaciones se basan en el artículo 55 del Reglamento Disciplinario, y se les imputan los siguientes cargos:
1. Violación de los Principios Generales de Conducta.
2. Incumplimiento de las normas básicas de conducta decente (artículo 11(2)(b)).
3. Uso de eventos deportivos para manifestaciones de naturaleza no deportiva (artículo 11(2)(c)).
4. Desprestigio del deporte del fútbol y de la UEFA en particular (artículo 11(2)(d)).
Este desarrollo sugiere que Rodrigo y Morata podrían enfrentar sanciones severas, similares a las impuestas anteriormente a otros jugadores por conductas controvertidas. Un precedente notable es el caso del turco Merih Demiral, quien fue suspendido por dos partidos durante la Eurocopa por realizar el saludo del lobo, asociado al grupo ultraderechista Lobos Grises.
El Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA será el encargado de determinar las sanciones correspondientes, en un proceso que ya ha generado un considerable revuelo en el mundo del fútbol.
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